Publicado en La Tercera
La molécula inmune recientemente identificada genera esperanzas de desarrollar una vacuna que pueda vencer muchas variantes y a cualquier tipo de coronavirus.
1. Descubren “superanticuerpo” que combate múltiples cepas
Científicos descubrieron un “súperanticuerpo” que es capaz de combatir no solo una amplia gama de variantes del Sars-CoV-2, sino también varios tipos de coronavirus estrechamente relacionados. El descubrimiento fue publicado por la revista Nature y según los investigadores podría ayudar en la búsqueda de desarrollar vacunas y tratamientos de amplio alcance.
Tyler Starr, bioquímico del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson en Seattle, Washington, y sus coautores se propusieron investigar un problema que enfrentan los tratamientos con anticuerpos para Covid-19: algunas variantes de Sars-CoV-2 han adquirido mutaciones que permitir que el virus escape del alcance de los anticuerpos.
Los investigadores examinaron 12 anticuerpos aislados de personas que se habían recuperado del Covid-19 por la empresa biotecnológica Vir Biotechnology, compañía con sede en San Francisco, California, que también participó en el estudio. Esos anticuerpos se adhieren a un fragmento de proteína viral que se une a los receptores de las células humanas. Muchas terapias de anticuerpos para la infección por Sars-CoV-2 capturan el mismo fragmento de proteína, llamado dominio de unión al receptor.
Los investigadores compilaron una lista de miles de mutaciones en los dominios de unión de múltiples variantes del Sars-CoV-2. También catalogaron mutaciones en el dominio de unión en docenas de coronavirus similares al Sars-CoV-2 que pertenecen a un grupo llamado sarbecovirus. Finalmente, evaluaron cómo todas estas mutaciones afectan la capacidad de los 12 anticuerpos para adherirse al dominio de unión.
Un anticuerpo, el S2H97, se destacó por su capacidad de adherirse a los dominios de unión de todos los sarbecovirus que probaron los investigadores. El S2H97, que los autores denominan un anticuerpo contra el pan-sarbecovirus, pudo evitar que una variedad de variantes del Sars-CoV-2 y otros sarbecovirus se propagaran entre las células que crecían en el laboratorio. También era lo suficientemente potente como para proteger a los hámsteres contra la infección por Sars-CoV-2. “Ese es el anticuerpo más genial que descubrimos”, dijo Starr.
Un examen más detenido de la estructura molecular de S2H97 reveló que se dirige a una región previamente invisible y bien oculta en el dominio de unión, una sección que se revela solo cuando el dominio aparece para unirse al receptor de una célula. Starr señaló que las moléculas que se dirigen a esta región de dominio de unión podrían generar protección contra múltiples virus, y algún día podrían usarse en vacunas contra pan-sarbecovirus.
Los otros 11 anticuerpos podrían apuntar a una variedad de virus, pero cuanto más eficazmente bloqueara un anticuerpo la entrada de la cepa Sars-CoV-2 más antigua conocida en una célula, menor será la gama de virus que podría unirse. El equipo también descubrió que los anticuerpos que podían desactivar una amplia variedad de virus se dirigían a secciones del dominio de unión que tendían a no cambiar a medida que evolucionaba el virus.
Es una buena noticia que el equipo haya identificado anticuerpos que pueden unirse a una variedad de sarbecovirus, dijo en el artículo de Nature Arinjay Banerjee, virólogo de la Universidad de Saskatchewan en Saskatoon, Canadá. “La pregunta más importante que queda es, ¿qué pasa con los virus que aún no sabemos que existen?”
Aunque los científicos no pueden probar la actividad de un anticuerpo contra un virus desconocido, agregó Banerjee, los tratamientos y vacunas contra el pan-sarbecovirus ayudarían a preparar al mundo para combatir el próximo coronavirus que salte de la vida silvestre a los humanos.
2. OMS no está segura de combinar vacunas
Conforme avanza la pandemia, muchos científicos y médicos han sostenido la eficiencia y hasta la necesidad, de combinar distintas vacunas contra el Covid, como una forma de combatir la baja en el nivel de anticuerpos y para luchar contra las distintas variantes que han surgido.
Sin embargo, pese a esta creciente evidencia, la científica jefa de la Organización Mundial de la Salud desaconsejó el lunes que las personas mezclen y combinen vacunas contra el Covid-19 de diferentes fabricantes, calificándola de una “tendencia peligrosa”, ya que se necesitan más datos científicos sobre el impacto que ello puede provocar en la salud.
“Es una tendencia un poco peligrosa”, dijo Soumya Swaminathan en una sesión informativa en línea del organismo sanitario. En la crítica de la funcionara también subyace la posibilidad que muchos países ricos comiencen a inocular con una tercera dosis a sus poblaciones, en circunstancias que muchas naciones ni siquira han iniciado sus procesos de vacunación. “Será una situación caótica en los países si los ciudadanos comienzan a decidir cuándo y quién tomará una segunda, una tercera y una cuarta dosis”.
Swaminathan calificó la mezcla como una “zona libre de datos” el lunes, pero la OMS aclaró el martes que hay algunos estudios disponibles y se esperan que lleguen más.
Su Grupo Asesor Estratégico de Expertos sobre vacunas dijo en junio que la vacuna Pfizer podría usarse como una segunda dosis después de una dosis inicial de AstraZeneca, si esta última no está disponible.
Los resultados de un ensayo clínico adicional dirigido por la Universidad de Oxford que buscará mezclar AstraZeneca y Pfizer, así como las vacunas Moderna y Novovax, están en curso.
“Se esperan datos de estudios de combinación y recombinación de diferentes vacunas; tanto la inmunogenicidad como la seguridad deben evaluarse”, dijo la OMS en comentarios enviados por correo electrónico.
Las agencias de salud pública deberían ser las que tomen decisiones, basándose en los datos disponibles, y no las personas, agregó la OMS.
3. Te puedes infectar con dos variantes simultáneamente
Aunque el caso ocurrió en marzo, en Bélgica, recién se supo este domingo, durante el desarollo de la 31° versión del Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas (ECCMID): una mujer de 90 años debió ser ingresada al hospital por una accidente doméstico, resultando positiva para pruebas al virus Sars-CoV-2. Durante su hospitalización, la condición médica de la mujer empeoró y cinco días después falleció a causa del Covid.
Pero lo más soreprendente, es qyue tras los exámenes a los que fue sometida, se descubrió que la mujer se había contagiado con la variante Alfa (B.1.1.7 o británica) y la variante Beta (B.1.351 o sudafricana).
“Este es uno de los primeros casos documentados de coinfección con dos variantes preocupantes del SarsCoV-2”, señaló a través de un comunicado la bióloga molecular Anne Vankeerberghen, autora del estudio. Es probable, dijo la especialista, que la mujer haya sido contagiada por dos personas diferentes. Respecto de la posibilidad de un cuadro más grave por la coinfección, Vankeerberghen señaló que “es difícil saberlo”.
Vivian Luchsinger, viróloga e investigadora del Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, explicó en una nota en Qué Pasa que “las coinfecciones de virus son infrecuentes, pero porque no se detectan y por lo tanto, no se sabe a ciencia cierta, qué tan frecuente pueden ser”.
Sin embargo, señaló que lo más probable es que sean “poco frecuentes”. En este caso específico se detectó porque se hizo un estudio de secuenciación del virus en la muestra positiva de esta mujer, pero se trata de exámenes que no son habituales.
Para que existen una coinfección, los virus deben contagiar al mismo tiempo, por cuando si existe un desfase de uno o dos días, el que ingresó primero desencadena una respuesta inmune que en términos simples, bloquea la replicación de otro virus en las células humanas.
“Otros virus respiratorios sí pueden desencadenar una coinfección. El virus influenza, por ejemplo, puede haber infección de A H1N1 y A H3N2, pero no es frecuente. Lo que sí es más habitual es la coinfección entre virus respiratorios. Nosotros hemos hecho estudio en adultos hospitalizados por neumonía y hemos detectado pacientes con Virus Respirarorio Sincicial (VRS), rinovirus e influenza. O virus y bacterias. Lo hemos visto en al menos un tercio de los pacientes”, dijo la investigadora.
Respecto de la evolución clínica de estos casos, si se desencadena una infección más grave o no, al menos en la experiencia de Luchsinger, no es así. “Tener un agente o varios no determina una enfermedad más grave”, señaló.
El riesgo de la coinfección con dos variantes, es que se produzca una recombinación en el genoma de los virus, lo que puede generar mayores cambios.
Un caso emblemático de recombinación viral ocurrió en 2009 con la última pandemia de influenza. Conocida como pandemia de gripe A (H1N1), los casos fueron causados por una variante del Influenzavirus A (subtipo H1N1), que surgió en 2009.
Con el tiempo, se pudo demostrar que la nueva cepa surgió a partir de una recombinación entre una variante de H1N1,7 con material genético proveniente de una cepa aviaria, dos cepas porcinas y una humana que tras sufrir una mutación, saltó de los cerdos a los humanos y desde allí se extendió por contagio entre personas.
En este caso, fue el cerdo el que alojó a todas las cepas, generó la cepa de virus nueva y “fabricó” la nueva que saltó al ser humano.
“En el virus influenza, por ejemplo, se sabe que los cerdos son capaces de infectarse con virus influenza de cerdos, aves y humanos al mismo tiempo. En ellos se puede producir un reordenamiento de los fragmentos del RNA del geonoma del virus influenza y es ahí donde han surgido el virus de la pandemia en 2009?, señaló Luchsinger.